Un aprendiz obtiene conocimiento de primera mano al ver cómo un experto
trabaja. Así también ocurre con la sabiduría. No leas acerca de ella en un
libro, ¡busca un experto!
¡Obviamente, una de las mejores maneras de adquirir sabiduría
es ir detrás de aquellos que la poseen!
Así como un aprendiz obtendrá conocimiento de
primera mano al observar cómo un experto trabaja, así también ocurre con la
sabiduría. Lo puedes leer todo en un libro, pero la mejor manera es observando
a un experto. Esta es la razón por la cual los sabios dicen que "servir a
una persona sabia es algo más grande que estudiar Torá".
La sociedad generalmente le da honor a los atletas,
a las personas adineradas, doctores, profesores. ¿Cómo tratarías a una de estas
persona si viniera a visitarte? Te levantarías e intentarías servirlo de la
mejor manera posible. Le pedirías consejos y lo escucharías atentamente. Toma
los principios que aplicas para respetar a estas personas y úsalos para
respetar a una persona sabia.
Honrar a una persona sabia significa aprender de él
y ayudarlo.
Necesitamos
Aprender Sobre la Vida
A nosotros, los seres humanos, nos gusta vernos como
seres independientes. Tenemos construida dentro de nosotros una resistencia a
la autoridad, y por ende, nos es muy difícil aceptar que necesitamos la ayuda
de otras personas. Mucha gente prefiere cometer sus propios errores antes que
aprender de aquellos que ya los cometieron. Creemos que podemos aprender todo
de nosotros mismos. Nos imaginamos que podemos casarnos, tener hijos y vivir
una vida significativa – y todo esto sin ningún tipo de preparación, en el
camino "nos vamos arreglando" y "vamos viendo que hacer"
¡Pero eso es absurdo!
Los 48 caminos hacia la sabiduría nos enseñan que la
vida es demasiado corta para pensar así. Estamos condenados a cometer errores,
¿para que agregar aquellos que podríamos evitar? Tienes que buscar personas
realmente sabias, unirte a ellos y hacerles una lista de preguntas cuando se
presente la oportunidad, y así, podrás alcanzar en 5 años lo que de otra manera
te tomaría 20 años (o incluso más).
Necesitamos consejeros. Nadie construye un
rascacielos sin los consejos de un experto o sin los planos. Pero la
"vida" es mucho más complicada que construir un rascacielos o hacer
una cirugía. Nunca soñarías en llevar a cabo una cirugía de corazón abierto
utilizando un sistema de "prueba y error". Entonces ¿¡por qué lo
haces con tu vida personal!?
Obsérvate hace 10
años. ¿Podrías ahora enseñarte a ti mismo algo sobre qué hacer y qué evitar?
¡Claro que sí! ¡Entonces ahora ve a hablar con alguien 10 años
más grande que tú! Seguro que él tendrá algo muy importante para enseñarte.
¿Acaso no sería inteligente escucharlo?
Como dice el refrán: "Un tonto aprende de sus propios errores y un sabio aprende de
los errores de los demás".
Prepárate
Para Absorber Sabiduría
Si aprendes todo de todos, serás una de las personas
más sabias del mundo. Pero obviamente eso no es práctico. Por lo tanto, tienes
que darle prioridad a tus necesidades de "sabiduría".
Empieza con una lista de diferentes situaciones de
la vida con las cuales esperas enfrentarte – por ejemplo: el matrimonio, educar
hijos, etc. Después agrégale a esto cuestiones de la vida más existenciales
como por ejemplo: "¿Cuál es el sentido de la creación?".
Escribe una lista de preguntas acerca de las cosas
que quieres saber de la vida y llévala siempre contigo – tienes que estar
preparado para preguntarle a la persona sabia:
¿Cómo puedo ser feliz?
¿Qué significa ser una "buena persona"?
¿Cómo puedo ser amable con los demás sin
aprovecharme de ellos?
¿Cuál es la clave para ser realmente increíble?
¿Cómo es el placer de tener hijos?
¿Cómo puedo ser un buen hijo o hija?
¿Cuáles son mis responsabilidades hacia mi
comunidad, hacia YHWH, hacia mi persona y hacia mi familia?
¿Cómo puedo utilizar mi tiempo de una manera sabia?
¿Qué viene primero la Torá o una profesión?
¿Cuál es el propósito del sufrimiento en el mundo?
Si pudieras conocer a alguien sabio el día de hoy, ¿qué le preguntarías?
Escogiendo
un Maestro Para la Vida
En la escuela, nos inculcaron la idea de que los
maestros van y vienen. Justo cuando empezabas a conocer a un maestro era tiempo
de pasar de año y de conocer a un nuevo maestro.
Si quieres un maestro para tu vida no te conformes
con el maestro más cercano – aquel que vive en tu misma calle. Ve de
"compras" de maestro. Cuando te encuentres con alguien que posea
sabiduría toma referencias, revisa sus credenciales, pon a prueba su sabiduría
con preguntas y más preguntas, averigua si vive honestamente y coherentemente
con su conocimiento. Después verifica sus orígenes, averigua quiénes son sus
maestros y asegúrate de que sea parte de una comunidad respetada.
Cuando escoges a un mentor, tienes que encontrar a
alguien con el que te puedas comunicar. Alguien que te entienda, que conozca tu
pasado e historia familiar. Idealmente, debes encontrar un maestro al que
puedas acudir a lo largo de tu vida. El poder de esto es que se pueden llegar a
conocer mutuamente de una manera profunda y de esta forma se desarrolle una
confianza y comunicación fuerte. Y por sobre todo, asegúrate de que sea alguien
que está disponible; porque puedes tener el mejor mentor del mundo pero si no
puedes hablar con él ¿de que te sirve?
No dejes de buscarlo. ¡Y no te des por vencido hasta
que encuentres al indicado!
El
Factor Lealtad
Encuentra a alguien que te reprenda y que te empuje
para que te conviertas en una mejor persona. No busques a alguien que acepte
tus debilidades y prejuicios.
Después de eso, una vez que hayas conseguido un
maestro, no lo dejes ir si estás en desacuerdo con su posición en algún asunto.
Sé un estudiante de la verdad. Trabaja los cuestionamientos con él. Escúchalo,
pídele consejo. Le debes respeto a esa persona.
Si eres leal a tu maestro, estarás menos propenso a
estar constantemente buscando a otro maestro cada vez que escuches algo que no
te guste. La crítica es difícil de soportar, pero es una "pastilla"
menos amarga cuando viene de alguien en quien confías, alguien que tiene mucha
inspiración y sabiduría, alguien que sólo piensa en tu bien.
¿Por qué tendemos a no reconocer la sabiduría de
nuestros padres y maestros? Porque la sabiduría requiere de nosotros un cambio.
Tenemos que movernos de nuestra postura cómoda y eso es doloroso. ¡Por eso preferimos
desechar toda la sabiduría!
Cuando se trata de uno mismo, el ser humano es
subjetivo. Un mentor te da un sentido de responsabilidad. ¡Reduce tu capacidad
de racionalizar! Cuando tienes un mentor firme, te sientes responsable y
piensas dos veces antes de actuar. "¿Que diría mi maestro si yo hiciera
esto?". Si no puedes responder a esta pregunta, entonces, mejor no lo
hagas.
Ayuda
a la Persona Sabia
Para poder ser realmente serio respecto de la
sabiduría, debemos demostrar respeto por la sabiduría. Podemos hacer esto al
ayudar activamente a aquellos que la poseen.
Sé un aprendiz. Sigue a tu maestro. Acompáñalo a sus
citas y mandados. Observa cada matiz. Esto – más que cualquier libro – te dará
la oportunidad de entender lo que hace que esta persona esté un poco más
elevada que el resto.
Servir a tu maestro te acercará más a él – y por
ende aprenderás más, crecerás más y llegarás a parecerte más a él.
¿Por Qué Honrar a una Persona Sabia es un
Ingrediente Para la Sabiduría?
Si realmente quieres aprender acerca de la
vida, entonces necesitas un maestro. Necesitas a alguien que te guíe en un
camino constante y racional.
Los seres humanos somos subjetivos acerca de
nosotros mismos. Necesitamos a otra persona que nos brinde la objetividad
necesaria para vivir bien.
No es fácil buscar a otra persona que tenga
sabiduría. Tenemos prejuicios. Queremos mantener nuestras creencias y defender
nuestra posición. ¡Resiste a la tentación!
La
enfermedad más destructiva es la ignorancia – no estar conectados con la realidad.
Tener un consejero objetivo es tan crucial que
incluso si sólo pudieras encontrar a alguien que es menos sabio de lo que tú
esperabas, ¡debes apegarte a él de todas maneras!
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